Empiezo la semana con una noticia que llega con un poquitín de retraso. El Hada de las palabras tuvo la amabilidad de ofrecerme una entrevista para su blog Donde los sueños se hacen realidad, y como no podía ser menos, acepté encantadísima. Así que, aunque uno días después, os dejo con la entrevista, en la que hablo sobre mis dos novelas y algunas otras cuestiones que os puedan interesar.
Como suelo hacer os dejo con un pequeño extracto de la entrevista, si queréis leerla completa pasad por Donde los sueños se hacen realidad.
Como suelo hacer os dejo con un pequeño extracto de la entrevista, si queréis leerla completa pasad por Donde los sueños se hacen realidad.
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¿Qué sientes cuando escribes y que quieres transmitir?
Cuando escribo siento la propia historia que estoy creando y a sus personajes, muy de cerca además. Tanto es así que suelo aislarme completamente, incluso si me hablan ni me entero porque me sumerjo en las letras. Supongo que vivirlo tan de cerca tiene sus ventajas porque pienso que de ese modo el resultado será lo más fiel posible a lo que tengo en la cabeza. En cuanto a qué pretendo transmitir varía mucho según la historia, pero hay algo fundamental y es que siempre intento hacer historias que entretengan y diviertan al lector (he dicho intento, que conste jajaja).
¿Qué tienen de ti tus obras?
Todo. Sin mi carácter o mis vivencias mis obras no serías como son, depende de mí, soy como una especie de dios todopoderoso. Lo siguiente será conquistar el mundo.
¿Fue difícil plasmar la idea en papel?
La primera vez que me senté a escribir La luz de Léoen fue un desastre. Por suerte no empecé con la historia definitiva sino con algunos relatos relacionados con el pasado de los personajes o sus padres. Practiqué durante muchos meses, realicé diferentes estudios y diseños, y cuando consideré que ya estaba todo listo escribí el primer capítulo. Una vez que desarrollas una metodología de trabajo todo es mucho más fácil. En mi caso jamás me siento a escribir sin tener los resúmenes o estudios previos pertinentes.
Cuando escribo siento la propia historia que estoy creando y a sus personajes, muy de cerca además. Tanto es así que suelo aislarme completamente, incluso si me hablan ni me entero porque me sumerjo en las letras. Supongo que vivirlo tan de cerca tiene sus ventajas porque pienso que de ese modo el resultado será lo más fiel posible a lo que tengo en la cabeza. En cuanto a qué pretendo transmitir varía mucho según la historia, pero hay algo fundamental y es que siempre intento hacer historias que entretengan y diviertan al lector (he dicho intento, que conste jajaja).
¿Qué tienen de ti tus obras?
Todo. Sin mi carácter o mis vivencias mis obras no serías como son, depende de mí, soy como una especie de dios todopoderoso. Lo siguiente será conquistar el mundo.
¿Fue difícil plasmar la idea en papel?
La primera vez que me senté a escribir La luz de Léoen fue un desastre. Por suerte no empecé con la historia definitiva sino con algunos relatos relacionados con el pasado de los personajes o sus padres. Practiqué durante muchos meses, realicé diferentes estudios y diseños, y cuando consideré que ya estaba todo listo escribí el primer capítulo. Una vez que desarrollas una metodología de trabajo todo es mucho más fácil. En mi caso jamás me siento a escribir sin tener los resúmenes o estudios previos pertinentes.
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Muchas gracias al Hada de las palabras por dedicarme un huequito en su maravilloso rincón.
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